Un legado, lo que una persona, grupo o evento deja como huella duradera en la sociedad, la cultura o la historia. Also known as herencia, it is not just about monuments or money—it’s about the choices that outlive the person who made them. En Chile, el legado no se mide en cifras, sino en gestos: en el trabajo de un bombero que inspira a un programa de televisión, en un músico cuya voz sigue vibrando en conciertos holográficos, o en un jugador que marca un gol que cambia el rumbo de un equipo. No es algo que se hereda pasivamente, sino que se construye con acciones cotidianas que, con el tiempo, se vuelven parte de la memoria colectiva.
El legado cultural, el conjunto de tradiciones, valores y expresiones artísticas que una comunidad transmite entre generaciones se ve claro en cómo Soda Stereo vuelve a sonar en el Movistar Arena, no como un recuerdo, sino como una presencia viva. El legado deportivo, el impacto que un atleta o equipo deja en el rendimiento, la táctica o la identidad de un deporte también se mide en cómo Javier Altamirano, con un gol de zurda, no solo llevó a la Universidad de Chile a semifinales, sino que se convirtió en símbolo para una nueva generación de hinchas. Y el legado social, el efecto duradero de decisiones que afectan derechos, justicia o seguridad lo vemos en el debate que generó la libertad condicional de Mauricio Ortega: no fue solo un fallo judicial, fue una pregunta que se quedó en la cabeza de miles: ¿qué queremos que quede de esto?
Lo interesante del legado es que no siempre lo planeamos. Lucy de la NASA no buscaba dejar un legado al sobrevolar un asteroide, pero sus datos cambiarán cómo entendemos el origen del sistema solar. Taylor Swift no pensó en escribir una canción para la historia al dedicarla a Travis Kelce, pero ‘The Fate of Ophelia’ se convirtió en un puente entre el pop y la literatura. El legado no es lo que gritas, es lo que otros recuerdan cuando ya no estás. Y aquí, en esta colección, encontrarás historias que no solo cuentan lo que pasó, sino lo que sigue pasando porque alguien, en algún momento, decidió hacer algo que valía la pena recordar.
El actor español José de la Torre, reconocido por su participación en series como 'Toy Boy' y 'Vis a Vis: El Oasis', ha fallecido a los 37 años debido a una enfermedad grave diagnosticada pocos meses atrás. Conocido por su pasión y dedicación en la actuación, su partida ha dejado una huella profunda en la comunidad cultural. Un misa en su honor se celebrará en Montilla, su ciudad natal.
